El concepto de preadolescente viene para quedarse, y no por moda. Si no como una necesidad a la hora de dialogar entre profesionales, padres, educadores etc. Como una necesidad a la hora de comprender y ayudar a nuestros hijos. Pero ¿qué es un preadolescente? “Mi hijo ya no es pequeño, pero tampoco es mayor. Si exacto, es un preadolescente”.
Algunas personas afirman que en otras épocas el periodo de la niñez duraba más, sin embargo actualmente parece que los niños maduran cada vez más pronto y parecen ser mayores de lo éramos nosotros a su edad. Esto se debe a que los niños de hoy interactúan en un mundo completamente diferente al que vivieron sus padres (internet, redes sociales, globalización etc.)
¿A qué edad comienza la preadolescencia?
Hay un consenso general a cerca del rango de edad en el cual comienza la preadolescencia, se entiende que entre los 9 y los 12 años se darán los cambios físicos y comportamentales que indican el cambió del niño al adolescente. Aunque este rango de edad puede variar en función de la familia, del niño, de su maduración y el momento evolutivo en el que se encuentre.
Comportamientos típicos en la preadolescencia
Llegados a este momento los niños van a “exigir” o mostrar signos de querer ser independientes y autónomos. Los padres, por su parte, los siguen viendo como niños, algunas veces no entienden o no toleran los cambios en la forma de ser del niño. Los conflictos están asegurados. Vigilar sin prensión y normalizar algunos de los comportamientos típicos de esta edad va a ser decisivo a la hora de atravesar esta etapa. Los siguientes comportamientos son típicos en el comienzo de la preadolescencia.
- Se muestra más frío
- Contesta con monosílabos. Echale un vistazo a nuestro artículo Mi hijo no me cuenta nada
- Rehuye las muestras de afecto. «Siempre fue tan cariñoso. Sin embargo ahora no quiere que lo abrace ni lo bese en público«.
- Buscan autonomía y libertad. Quieren hacer las cosas a su manera, a algunos niños les pueden comenzar a molestar que sus padres le digan lo que tienen que hacer en cada momento. Por el contrario agradecen y se enorgullecen cuando los demás le dan muestras de confianza. De alguna manera buscan responsabilidades y agradecen el reconocimiento,
- Buscan su propia identidad a través de gustos, aficiones, formas de vestir. Puede que se aficionen a un grupo o estilo de música específico. O que muestren interés por vestir de una determinada manera. Los padres observan como los niños pasan mucho más tiempo en su cuarto, escuchando música, leyendo, en el ordenador etc. Esto puede ser un reflejo de su búsqueda de identidad.
- Descubrimiento de si mismo: capacidades, cualidades, intereses, gustos… El preadolescente busca aquello en lo que se siente capacitado e integrado. A veces pueden pasar por periodos de “prueba”, probar con un estilo de vestir, con unos gustos musicales o con una forma de hablar especifica.
- Ya no juega como antes. Ten paciencia, durante este periodo los preadolescentes se siente demasiado mayores para los juegos de los niños más pequeños. Pero a la vez se sienten demasiado pequeños para encajar en otras actividades más típicas de los chicos de 15 o 16 años.
- Rebeldía. Comienza a ser más sensible a ciertas situaciones: cuando fracasa, cuando no se siente aceptado, cuando no se siente tratado justamente, Las reacciones a estas situaciones van a ser arrogantes y desafiantes. En la preadolescencia los niños dicen NO a ciertas pautas de los padres y cuestionan las normas internas de casa.
- Apego por el grupo de iguales. La pertenencia al grupo de iguales cobra mucha importancia. Los padres lo pueden interpretar como un alejamiento de ellos. Algunos padres piensan que sus hijos tratan de agradar constantemente a su amigos, esto se debe a que el grupo de iguales se convierte en el centro de referencia. Acuden a sus amigos para construir, comparar y valorar sus propios pensammientos y actitudes
- Pueden aparecer nuevos miedos, especialmente relacionados con las relaciones sociales. Por ejemplo el temor a “hacer el ridículo” por no vestir de determinada manera, por decir algo inapropiado etc.
- El sentimiento de pudor o vergüenza ante su propio cuerpo, que se encuentra en pleno cambio, puede llevarle a experimentar conflictos con su propia imagen corporal.
- Labilidad emocional. Esto es, cambios de humor repentinos. Esto se debe a su forma de experimentar el mundo, un mundo donde las cosas son completamente ideales o absolutamente detestables. No hay términos medios
Con todos estos cambios las fricciones y los conflictos estarán a la orden del dia. Tomar conciencia de que todos estos comportamientos forman parte del desarrollo del niño, nos ayudará a gestionar mejor este periodo.
Tenemos que tener en cuenta que asumir estos cambios no solo es difícil para los padres, sino también para el propio niño, afrontar todas estas transformaciones y lograr su paso de la niñez a la adolescencia de una manera equilibrada precisará la comprensión y el apoyo de los padres.